Medicina del Estilo de Vida
Hoy vengo para hacer una pequeña entrada comentándoos las cosillas que tengo en mente, y en las cuales estoy trabajando.

Venía pensando últimamente en la manera en que abordamos la salud. Se nos enseña la medicina en las Facultades como un problema a resolver: unos síntomas, unos posibles diagnósticos, un diagnóstico final obtenido por medio de unas pruebas. Pero los determinantes sociales no tenían mucho lugar en toda la ecuación, a pesar de lo importantes que son. Apenas recuerdo una asignatura donde se hablaba de los aspectos sociales que influyen en la salud de las personas y en la posibilidad real de éstas para mejorarla.
Luego cuando empecé la residencia es lógico que sí, gané mucha soltura a la hora de manejar hipótesis diagnósticas, así como la incertidumbre y la limitación que implica en ocasiones la medicina convencional. Siempre queremos curar, pero a veces no es posible y solo abandonando el ego profesional podemos darnos cuenta de todas las posibilidades que tenemos a la hora de tratar a una persona. No es solo curar: es ayudar, es acompañar, es escuchar, es paliar. Igual o más importante, pero quizá mucho menos glamuroso para el ego del médico clásico. Pero igual de gratificante, al menos, para el común de los mortales. Y para mí, que por muy médica que sea, no dejo de ser, primero, persona.
La Medicina de Familia tiene el enorme honor de ser de las pocas especialidades médicas que aún contempla ver al paciente como un todo, el conjunto de sus características físicas, psíquicas, sus relaciones sociales, su familia, su sociedad. Vemos las imbrincadas conexiones que se establecen entre todo ello y razonamos en base a ello. A esto se le llama "medicina del estilo de vida" [1]. Pongo un ejemplo: ¿qué sentido tiene que le diga a una persona que tiene que trabajar en su modo de gestionar la ansiedad en el trabajo si resulta que su situación económica le impide acceder a un tratamiento psicológico privado y es casi imposible obtenerlo por la Sanidad Pública? Ojo, no hablo mal del Sistema Público: reivindico que no se invierte en él lo suficiente como para vencer este tipo de barreras económicas.
Poder ver al paciente como un todo, en su ambiente habitual, no solo es una posibilidad terapéutica sino un privilegio
Por todo esto, empecé a formar una idea cada vez más clara de cómo quería hacer yo las cosas en medicina. Empiezo a formar mi criterio a la hora de decidir cómo atender a las personas, a qué le voy a dar más importancia relativa, y me encuentro con que el Sistema Público de Salud cuenta con unas limitaciones (fundamentalmente falta de personal y de otros recursos) que lo convierten en un medio hostil para hacer las cosas como a mí como profesional me gustaría hacerlo. No quiere decir que vaya a dejar el sistema en cuanto acabe la residencia, desde luego que no. Pero sí empecé a gestar la idea de hacer algo en paralelo a nivel privado... solo que no sabía darle nombre. Sabía qué quería y cómo quería hacerlo, pero no sabía nombarlo o explicarlo bien... hasta que llegó por casualidad a mis manos un día el artículo que os he mencionado más arriba (y que os dejo al final de este texto). La Medicina del Estilo de Vida.

Yo no quiero ponerle estatinas al que tiene el colesterol alto. Yo quiero que entienda por qué lo tiene alto, que entienda los riesgos que conlleva. Que analicemos cómo come, cómo se ejercita (o si lo hace) que busquemos una forma fácil para mejorar esos aspectos, y que genere adherencia. Y si con esas mejoras no conseguimos bajar a niveles óptimos, entonces poner el fármaco.
Yo no quiero que una persona sufra de problemas de sueño y arreglarlo con una benzodiacepina. Quiero que me cuente qué problemas exactamente tiene. Si tiene definida una rutina de higiene de sueño o no. Si está estresado, triste, si necesita hablar. Quiero enseñarle a dejar las pantallas por la noche, a hacer ejercicios de relajación. Y una vez la persona sepa cómo ha de hacer todo eso, si lo sigue necesitando, entonces le pondré la medicación que precise.
No quiero empezar la casa por el tejado.
Y por eso os anuncio, adelantándome un poco al momento adecuado... mi idea:
Asesorías de estilo de vida: veamos qué problema de salud tienes, y qué tenemos en nuestras manos (las tuyas y las mías) para poder contribuir a mejorar tu estado físico y mental de forma realmente accesible y flexible, adaptado a ti. Para que, junto con los tratamientos farmacológicos que tu médico considere adecuados, podamos obtener los mejores resultados y, lo más importante: mantenerlos en el tiempo.
Segunda opinión: a veces en consultas vamos muy rápido, lo sé. Tenemos poco tiempo para explicar las cosas, a veces quedan dudas. Unas veces más razonables y otras menos, pero todas con derecho a ser resueltas. ¿Quieres una segunda opinión? ¿Necesitas entender el proceso por el cual estás pasando? Puedes contar conmigo para escuchar y valorar tu caso, resolverte todas tus dudas y despejar tu mente. Al final, entender el por qué de cualquier intervención sanitaria y tener la certeza de que estás haciéndolo bien, es salud. Es adherencia. Se transforma en resultados.
Infoproductos: actualmente estoy trabajando en la escritura y maquetación del primer infoproducto para vosotras. Porque al final, creo que no hay nada más bonito que entender cómo funciona nuestro cuerpo, y saber reaccionar a tiempo cuando algo no va bien (o saber cuándo algo tiene menos importancia de la que le damos... y podemos relajarnos al respecto). Creo que en esto estamos de acuerdo, ¿a que sí?

Os agradezco enormemente la confianza que depositáis en mí diariamente. Tanto por privados, como en la consulta cuando venís de forma presencial. En principio, todo esto comenzará de forma oficial a partir del verano que viene, pero me apetecía comentároslo para que lo tengáis en mente. Será por el momento todo online, ya que establecer una consulta física conlleva la necesidad de unos recursos económicos y una cartera fija de pacientes que lo haga posible. Pero todo se andará... no os preocupéis.
Por el momento, podéis contactarme por el formulario de contacto de esta web así como por mensaje privado en Instagram. Son las dos vías en las que me encontraréis más accesible, a día de hoy. Cuando despeguemos de forma oficial, os comunicaré las que serán desde ese momento las vías oficiales para contacto.
¡Muchas gracias a todos! Vamos a conseguir nuestra mejor versión ;)
Bibliografía: https://www.elsevier.es/es-revista-revista-medica-clinica-las-condes-202-articulo-que-es-medicina-del-estilo-S0716864021000638